Edificios Barón de la Torre 8-10
Calle Barón de la Torre 8-10, Madrid
Este encargo tiene su origen en una modificación de la normativa urbanística, que pasó a autorizar viviendas adosadas en parcelas pequeñas en un entorno de viviendas unifamiliares. Esto originó la construcción de pequeños grupos de cuatro casas en hilera en parcelas de mil metros cuadrados, previamente ocupadas por una sola vivienda.
La solución adoptada trata de integrar plástica y funcionalmente las casas. La composición volumétrica extiende las posibilidades de ajardinamiento y los materiales utilizados realzan la vegetación, contrastándola con el color claro de la piedra caliza y buscando la reflexión del vidrio. Cada casa, a pesar del poco espacio disponible, tiene piscina y jardín privados y el programa de una vivienda unifamiliar asimilable a las del entorno, exprimiendo las posibilidades edificatorias.
El concepto resultó exitoso y fue imitado en promociones análogas posteriores. En el conjunto de la urbanización estos grupos de casas en hilera quedaron como anécdotas, pues el sentido común se impuso, y la normativa revirtió a su tipología original.
La solución adoptada trata de integrar plástica y funcionalmente las casas. La composición volumétrica extiende las posibilidades de ajardinamiento y los materiales utilizados realzan la vegetación, contrastándola con el color claro de la piedra caliza y buscando la reflexión del vidrio. Cada casa, a pesar del poco espacio disponible, tiene piscina y jardín privados y el programa de una vivienda unifamiliar asimilable a las del entorno, exprimiendo las posibilidades edificatorias.
El concepto resultó exitoso y fue imitado en promociones análogas posteriores. En el conjunto de la urbanización estos grupos de casas en hilera quedaron como anécdotas, pues el sentido común se impuso, y la normativa revirtió a su tipología original.
Viviendas unifamiliares
Calle Barón de la Torre 8-10, Madrid
1990